Inevitablemente Federico transita por la Escuela Japonesa , gracias a las vivencia y modas que ya se reflejaban en Montparnasse en los años 20s
Durante un recorrido propuesto a manera de narrativa dentro de la curaduría de la expo 2019 la colección de Arte Cantú y de Teresa crea un ambiente curatorial donde una serie de obras de caballete reflejan el calidoscopio creativo de Federico Cantú.
Esta visión creativa que lo mantuvo ocupado durante una vida se nos muestra tanto en escultura como en pintura .
En el Paris de la década de los 20s se reprodujeron momentos que de alguna manera habían terminado abruptamente , casi desplazados por los cambios y modas, es asi como a partir del fin de la Primera gran Guarra , muchos artistas se dan a la tarea de recuperar anteriores tendencias y modas , de ahí el nuevo surgimientos de la familia de arlequín y pasajes cubistas con elementos y colores novedosos
Fue mucho mas tarde la comprensión y la recuperación de la imagen de Carranza
Misma que se gesto en le gobierno de Ávila Camacho pero que fecundaría como imagen en la memoria de Ruiz Cortines , quien por encargo pide a Federico Cantú
La ilustración grafica incluida en el libro que narra el proyecto de Gobierno
Cantú concluye su medio siglo con una basta obra monumental , donde surgen esos colosos descritos por Antonin Artaud en esa época donde el poeta maldito y Cantú conviven en México durante ese agitado año de 1936